Soñarse atacado por una pantera, tigre, león u otro felino semejante sugiere que el futuro es muy incierto, presentando serios riesgos.
Soñarse matando a uno de estos felinos sugiere que, a pesar de las dificultades que se presenten, finalmente triunfará.
Soñar a estos felinos enjaulados puede significar que las intrigas de los enemigos no prosperarán.
Soñar a estos felinos en su hábitat natural, pero huyendo, sugiere que los propios asuntos mejorarán mediante esfuerzo y atención.
Soñar la piel de alguno de estos felinos sugiere ingratitud de personas a quienes de alguna manera se ha favorecido.
Soñar una pantera negra es siempre aviso de peligro, de obstáculos y dificultades, particularmente en lo afectivo, como desavenencias en el matrimonio.
Suele anunciar además problemas en el trabajo.
Soñarse matando a una pantera negra, o por lo menos dominándola, es símbolo de triunfo sobre las adversidades.
Soñar que una pantera lo amenaza es símbolo de que los enemigos intentan perjudicar al soñante.
El simple rugido en un sueño es anuncio de malas noticias motivadas por la deslealtad de alguien.
Es siempre de mal augurio soñar con un tigre, suele ser un aviso de que un enemigo poderoso, a quien hacía tiempo no se veía, se va a aparecer nuevamente.