Fantasmas

Soñar fantasmas con túnica blanca y en actitud alegre, o por lo menos amable, anuncia próximos éxitos y realización de deseos largamente acariciados, lo que incluye beneficios y ganancias materiales.

Las personas jóvenes que sueñan con cierta frecuencia fantasmas vestidos de negro deben vigilar su conducta en general, pero de manera particular en el aspecto sexual, pues va de por medio su porvenir.

Soñar el fantasma de una o varias personas conocidas y que aún viven es signo de que no ha puesto la debida atención en sus actividades, como son las relaciones sociales y los negocios, lo cual perjudicará al soñante.

Soñar que de manera repentina aparece uno o más fantasmas vestidos de negro y luego desaparecen anuncia próximas calamidades en las que están en juego importantes intereses materiales y en algunos casos hasta la vida.

Soñar el fantasma del padre o la madre cuando ya están muertos insinúa que se busca protección por estar expuesto a peligros desconocidos, o que se tienen dudas al entrar en tratos con personas extrañas.

Soñar el fantasma de algún amigo ya muerto anuncia viajes desagradables.

Soñar que un fantasma le habla directamente avisa sobre el riesgo de ser víctima de personas que actúan de mala fe.

Soñar que se le presenta un fantasma insinúa que en el soñante puede haber algunos trastornos mentales o, lo que es más frecuente, que pronto recibirá inesperadas sorpresas, agradables o desagradables.