Cuando un hombre sueña que su mujer está trapeando o lavando los pisos o paredes anuncia que sufrirá vergüenzas, penas, compromisos ineludibles, lo que lo pone en riesgo de ser víctima del chantaje.

Es el mismo significado en el caso de ser el hombre quien maneje el trapeador.

En ambos casos, si el trapero aparece roto, insinúa próximas penalidades y fracasos debido a relaciones sociales o sentimentales inconvenientes.